UN DIA PARA UN ADIOS,JAMAS SERA SUFICIENTE...NI DOS.

Es gracioso y triste cada vez que recuerdo,casi a una mezcla de pisco con cerveza americana de baja calidad,de como quedo enganchado cuando firme voz y convicción que a un año regresaria de este viaje al norte, de 7 horas sin escalas dirigiéndome a otra ciudad pensando saber lo que en verdad significaba, al ver en pleno vuelo la pantallita de colores con una imagen animada del avión moviendose sin pena, pero cargando la de muchos otros como yo seguramente.

Desde aquel día hasta hoy todo paso lento y pesado, pero lo recuerdo como hubiera estado hace dos minutos justamente ahí, sobretodo desde la tarde;cuando fui para conseguir todas las temporadas de 24 (la serie) en Polvos Azules, muchos encargos para mi madre a la cual deseaba ver después de varios años tanto como a mis hermanos, claro. Ese 22 de diciembre del 2006 ya eran las 2 de la tarde cuando visite por ultima vez a mi ex-enamorada, Evelyn, era la ultima vez que toque su puerta para que saliera a recibirme, aunque ya esos meses no eramos novios ni enamorados,si habia algo, nos queriamos por todo aquello que pasamos juntos, eso jamas fue poco,ademas para aquello no había etiqueta alguna, pasamos unas horas conversanso,riendo,y chillando, ella no fue al aeropuerto lamentablemente (yo se porque, pero no lo dire), pero nos dimos un gran beso que jamas olvidare: largo y dulce como si apenas estuvieramos en los dias que andabamos conociendonos,ya despues de muchas veces decirnos adios, chau, hasta pronto, te quiero, cuidate... tuve que marcharme a mi casa, me quedaban 4 horas para estar dentro del avion. Sali irremediablemente con lágrimas, ya no la vería mas y definitivamente la extrañaría demasiado.

Ya en casa alistándome llegaron dos extraordinarios amigos, los mejores que se pueden tener: Gianfranco y Daniel, se hizieron presente ese día, me ayudaron a empacar, tampoco fueron al aeropuerto, pero cuando me despedi de ellos fue duro, no llore, pero sentí una pena muy grande, ellos son mis dos mejores amigos, y aunque pase mucho tiempo en este país jamas volvere hallar

esa sinceridad de patas. Estando en el aeropuerto pase las puertas, los counter de verificacion, aborde y estaba listo para irme, perdón... dije : estaba listo? en verdad jamas lo estuve, pero ya no podía hacer otra cosa que esperar las indicaciones de cabina y aguardar todo el futuro que estaba por venir, uno demasiado incierto o mas bien lleno de espectativas como me hubieran gustado, ahora ya pienso que seria mas facil tomar un billete de 2 dolares (que si los hay), marcarlo, comprar algo y esperar que regrese a mi, a que pueda regresar tan rapido como pudiera fantasiar.

Tambien existen momentos en que me pregunto si en verdad soy afortunado, que deberia dejar estar renegando de mi "infortunio" por estar aca, saben cuantas personas desearian estar en mis zapatos ? o por ahi sera que el amor a estar cerca a los mio me ciega a un futuro mejor, o eso dicen, yo aun no lo puedo ver asi.

ILUSTRACIÓN: Alfonso Vargas S. (a) Robotv.